![]() @sukosomoza Google+ |
Robar una moto puede ser un acto más o menos complicado en función del vehículo que estés intentando sustraer y de la gente que te esté observando. Por lo general, los chorizos de motos aprovechan la noche y las zonas poco transitadas para cometer sus fechorías, pero hay otros a los que les da todo igual y tratan de llevarse una moto bajo cualquier circunstancia.
En el vídeo de hoy, vemos a un ladrón que, ni corto ni perezoso, se pone a romper el bloqueo de una Triumph Daytona 675 con un martillo a plena luz del día. El descaro de su acción no pasa desapercibido para uno de los vigilantes de seguridad del centro comercial, que sale a su encuentro cuando el chorizo ya está subido en la moto y evita el robo. ¡Lástima que no se haya ido calentito a casa!
El vídeo del robo termina en el segundo 0:52, a partir de ahí no hay nada interesante.